He encontrado otro tesoro navegando: Open-Roulotte. No pude esperar a hablar con ellos en directo. Es una iniciativa de La Fundició, un colectivo de gente muy maja que han montado una cooperativa de servicios educativos y producción cultural. Open-Roulotte es un proyecto que trabaja con el espacio público de la mano de una institución de enseñanza un tanto especial. El CEIP El Martinet, de Ripollet, está llevando a cabo desde hace algunos cursos una experiencia piloto con un sistema docente completamente distinto al que hicimos nosotros en la escuela. Un colectivo de profesores-pedagogos proponen la agrupación de los chavales en 3 grupos (pequeños, medianos, mayores) y éstos aprenden a través de diferentes experiencias guiadas por los 'antes llamados profesores'. Huyendo de descripciones encajonadas en materias estancas, se pretende que los jóvenes adquieran habilidades conectadas y directamente aplicadas a situaciones reales encontradas en la ciudad, en sus vecinos, sus compañeros o sus hogares. Una suerte de deriva situacionista como experiencia formativa.
Dentro de la interesante alternativa, estos aventureros de la Fundició han conseguido entrar con sus propuestas. El arte como experiencia de la vida y la misma vida como escuela. Borrando los límites entre arte y vida. Borrándolos para los que nos hemos 'formado clásicamente'. Para esos chavales, la construcción del mundo será distinta y consciente, de forma crítica, de muchas y diversas realidades que viven ya en la misma escuela.
Estos amigos de la Fundició nos regalan en la wiki del proyecto mucha información de las actividades que hacen en la Escuela. Tras el periodo de investigación y estudio de campo sobre la ciudad y el tejido urbano público, se propondrá a los chavales organizar una emisora de radio donde explicar las conclusiones. Además, y también en colaboración con la gente de Ripollet, se elaborará el diseño de una Unidad móvil que será la traducción física de todas esas intenciones de colaboración entre ciudad y escuela. La escuela se transforma en un espacio público para Ripollet y Ripollet se transforma en el 'laboratorio' donde aprenderán l@s niñ@s del CEIP El Martinet. Será un modo de hacer emerger la realidad de la ciudad usándola como combustible para su conocimiento.
Dentro de la interesante alternativa, estos aventureros de la Fundició han conseguido entrar con sus propuestas. El arte como experiencia de la vida y la misma vida como escuela. Borrando los límites entre arte y vida. Borrándolos para los que nos hemos 'formado clásicamente'. Para esos chavales, la construcción del mundo será distinta y consciente, de forma crítica, de muchas y diversas realidades que viven ya en la misma escuela.
Estos amigos de la Fundició nos regalan en la wiki del proyecto mucha información de las actividades que hacen en la Escuela. Tras el periodo de investigación y estudio de campo sobre la ciudad y el tejido urbano público, se propondrá a los chavales organizar una emisora de radio donde explicar las conclusiones. Además, y también en colaboración con la gente de Ripollet, se elaborará el diseño de una Unidad móvil que será la traducción física de todas esas intenciones de colaboración entre ciudad y escuela. La escuela se transforma en un espacio público para Ripollet y Ripollet se transforma en el 'laboratorio' donde aprenderán l@s niñ@s del CEIP El Martinet. Será un modo de hacer emerger la realidad de la ciudad usándola como combustible para su conocimiento.
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